Una vez más,
Juliano el Apostata se convierte en anfitrión. Esta vez el tema propuesto es
Juegos Olímpicos. Con alguna participación en algún juego inventado.
No sé si es
exactamente la idea que propone, pero algo está en mi mente. Tal vez, mi juego
olímpico sea ser uno de los primeros en presentar el relato en este jueves. Tal
vez el primero.
La historia de Atalanta
Mara Laira estaba en Virtualidad, su programa de radio.
- Ahora voy a contarles una historia. Van a creer que es ficción,
por eso se las puedo contar. Pero es una historia real.
Empezó en un mundo paralelo, un mundo caótico en que confluyen
restos de otros mundos. En una de las regiones, una mujer llamada Atalanta, se
interesó por las esculturas encontradas en esas ruinas.
Avanzar en su vocación tenía un costo, que ella no podía pagar. Tuvo
que resignarse modelando en arcilla.
Pero en la caótica mezcla de pasados, descubrieron los Juegos
Olímpicos. Atalanta se fascinó ante los primeros atletas. Tanto que quiso
entrenar.
Y fue aceptada porque, diferencia de los primeros juegos de este
mundo, las mujeres eran aceptadas. Y porque veían cierto potencial en ella. O
tal vez porque querían desafiarla. Por eso, su entrenamiento fue especialmente
riguroso.
Ella demostró tener una notable resistencia física, como fuerza y
una velocidad que fue siendo superlativa. Fue exigida más y más, ella siguió
respondiendo.
Ella participó en distintas disciplinas, como lanzamiento de
garrocha, carreras de atletismo, alguna clase de lucha.
Se convirtió en una campeona olímpica, amada y admirada. Fue recompensada
con una estatua. Y con el ingreso a una recién creada Academia de Escultura.
Tiempo después, surgió una región, donde se comenzó a investigar
críticamente el pasado. Necesitaban a alguien que entendiera de escultura.
Y sus maestros, que ya no tenían nada que enseñarle, la enviaron
a ella.
Pronto ella, se convirtió en la jefa del área artística.
Y fue amada y deseada por todos. Ella fue desinhibida, generosa
con sus encantos, como dice cierto amigo que escribió este relato. Lo que en
ese mundo es algo celebrado.
Actualmente, ella está en este mundo, acompañando a un amigo mío.
Por estos días, ella volverá a su mundo. Nuevamente, participará de los Juegos
Olímpicos, representando a su región de origen.
Pueden creer que es real o ficción- concluyó Mara Laira- Pero
quería contarles esta historia de superación, la historia de alguien que
admiro.
Más Juegos Olímpicos en lo de Juliano
el Apostata.
Me hs gudtado rsa historia mitad real mitad ficvión, jejeje
ResponderEliminarMitad realidad, mitad ficción. Algo que no fue buscado, llegó como inspiración. Me gustó tu jejeje.
EliminarGracias por el comentario.
muy buena como siempre
ResponderEliminarsaludos
Que bien que te guste.
EliminarUn placer leer tus comentarios.
Un abrazo.
inventar a partir de una consigna, ese si que es un juego olimpico, de los dificiles.! Le admiro el talento para hacerlo
ResponderEliminarY no soy el único que lo hace. Siempre hay participantes cada jueves.
EliminarGracias por el comentario.
Que me ha gustado mucho. Un personaje con mucho carisma.
ResponderEliminarUn gusto leerte, como siempre <3
¡Un abrazo!
Bye!
Que bien que te guste. Y eso de que el personaje tiene mucho carisma.
EliminarUn gusto leer tus comentarios.
Un abrazo.
Ese mundo en donde "la generosidad con los propios encantos es algo celebrado" debe requerir de mucha caballerosidad y gentileza en retribución de otro modo creo que no funcionaría =D
ResponderEliminarBuena manera hallaste de responder a esta nueva convocatoria, Demiurgo. Hasta el momento, a mí, en cambio, no se me ha ocurrido nada.
Un fuerte abrazo
No lo he mencionado, pero creo que sí, que Atalanta es tratada con cortesía en su mundo paralelo, donde es admirada y respetada. Buena observación.
EliminarQue bien que te guste. yo no habría podido, sino fuera por contar con el personaje justo para este jueves.
Un gran abrazo.
¿Sabes?
ResponderEliminarMe gustó
tiene mucho
de vos ya que son tus bellas letras
Gracias por tus elogios, expresados en bella forma.
EliminarY es que si uno se lo propone, puede llegar donde quiera, y eso le pasó a Atalanta, lo consiguió.
ResponderEliminarMe gustó tu relato con esos mundos paralelos.
Un abrazo
Y es que si uno se lo propone, puede conseguir lo que quiera, y a voluntad no hay quien gane a Atalanta.
ResponderEliminarMe gustaron esos mundos paralelos.
Un abrazo
Coincidís con Mara Laira. Me gusta eso de la voluntad.
EliminarEs un tema que me gusta.
Gracias por el comentario.
Un abrazo.
Sí que fuiste el primero sí. Te vi yo y estuve por hacerte la ola :-)
ResponderEliminarAl lío, a ver...
El lanzamiento de garroche me ha dado en todo el ojo. Me lo he imaginado. Me supongo que en tu pueblo debe ser la jabalina o el disco pero por estos lares no deja de ser un palo que hace las veces de bastón, y además, me lo he imaginado algo rústico. Ha sido tremenda la imagen que me ha venido.
Gracias por esta sonrisa.
Un besito.
Que manera de visualizarlo. Hasta casi escribir un relato sobre eso.
EliminarUna detallada imagen la que tuviste.
Un especial beso.
Muy bueno. Mara Laira siempre encuentra buenas historias. No te pongas celoso, vos también.
ResponderEliminarmariarosa
¿En serio? Que bien, no me pone celoso sino orgulloso.
EliminarGracias por el comentario.
Muy buen relato. :)
ResponderEliminarUn saludo
Que bien que te parezca muy buen relato.
EliminarBienvenida al blog, si es de tu interés.
Saludos.
Hola; me llamó la atención la elección de una mujer como protagonista de tesón y de virtud. Esto muestra que la figura femenina sobresale de la masculina tras muchos años de pensamiento trasnochado. Salud.
ResponderEliminarEs que el personaje tiene bastante trascendencia entre los lectores y me pareció compatible con el tema, por sus características. Y de paso podría contar algo de su pasado.
EliminarNo lo había pensado pero puede ser lo que comentá.
Saludos.
Otra buena historia de realidades paralelas. Confieso que con lo de prohibir participar a las mujeres en los Juegos me ha venido a la memoria "Astérix en los Juegos Olímpicos" (Par mí, el mejor álbum de la saga) la escena en la que una mujer, obligada a salir de la
ResponderEliminarcola de entrada grita. "¡Ya veréis! ¡Llegará un día en que las mujeres participaremos en las Olimpiadas!"
Saludos!
Borgo.
Me gusta tu definición de mi relato.
EliminarY además te hizo acordar a una escena de Asterix, de lo que pensas el mejor álbum de una saga. Y es interesante lo que recordás.
Saludos.
Pues a mí me ha encantado ver aquí a Mara, qué sorpresa me he llevado, no me la esperaba, y más me ha encantado leer el relato que nos cuenta sobre Atalanta que parece más bien, según dice, real, pero sobre todo, el que una mujer sobresalga y llegue a ser jefa del área artística, ya está bien de que sobresalgan los hombres, las mujeres también lo hacen, por lo que, ésta entrada me gustó doblemente especial, por tener aquí a Mara y a Atalanta, estos personajes tan admirados y queridos.
ResponderEliminarHoy te mando besos muy especiales.
Es que había estado mucho tiempo ausente. Pensé que ya la estaban extrañando. Y quien mejor para contar la historia de Atalanta, que es su amiga.
EliminarHay mujeres que sobresalen y está bien que se las reconozca por eso. Es algo justo.
Mara lo ha logrado y parece que también lo ha hecho Atalanta.
Te retribuyo esos muy especiales beso.
Es interesante cómo un personaje de tu ficción puede hablar de ficción y "realidad" y hacer su propio relato de ficción con otro de tus personajes inmerso en él... y encima que hable de "un amigo"
ResponderEliminarInteresante cruce de mundos
Abrazo!!
Que interesante observación. No lo había notado.
EliminarY además es su mejor amiga.
Parece que está clara esa alusión.
¿Recursos borgeanos?
Gracias por el comentario.
Yo propongo que la decapitación de políticos corruptos sea incluida en las pruebas de los juegos olímpicos. De esa manera, con tantos corruptos que hay en el país, nuestros atletas serían los mejores, sin dudas.
ResponderEliminarSaludos
J.
Para eso se podrían crear los juegos de Nemesis, la justicia vengativa. Interesante planteo, colega demiurgo.
Eliminarhacía rato que no escuchaba hablar de Atalanta, tanto que casi no recordaba su historia, me gusto volver a leer sobre el tema y con algunos toques ficcionales.
ResponderEliminarsaludos!
Es por eso que me pareció bien escribir una historia sobre ella. Y era una oportunidad para hablar de su pasado.
EliminarGracias por el comentario.