Me sumo a
los relatos jueveros, aunque tal vez no me ajuste del todo al tema. Pero
aprovecho para continuar una saga que empezó por casualidad, despertando
curiosidad. La única objeción es que me parecen poco 100 palabras. Con 300,
habría podido ajustarme más al tema propuesto.
El
historietista se sorprendió cuando ella anunció que podía quedarse más tiempo.
Era algo que
no habría imaginado posible, la primera vez que la mujer felina lo visitó. Fue
cuando comenzó a posar para él e inspirarle historias, que le permitieron decir
basta a ser ayudante de otros.
Alguna vez
ella habló de las veces en que dijo ¡Basta! A veces se indignaba, sus ojos
literalmente brillaban. Ella tenía principios aunque los demostraba quebrando
algunas leyes.
Y ahora
estaba muy junto a él, vestida solamente con la máscara y con la peluca rubia.
Dormía plácidamente. Pero él no se
habría atrevido a espiar tras la máscara o acariciarla a contrapelo. Sabía que
eso le disgustaría y no quería perder su confianza.
Historias previas del historietista y la mujer felina
Primera
aparición de la mujer felina (20/9712)
El decir basta de la dama puede significar ¡estoy harta!, salvo que ella estaba disimulando otros planes......nunca se sabe.....¡saludos amigo El Demiurgo de Hurlingham!!!!
ResponderEliminarMe gusta que se haya notado el planteo de la dama, que sigue siendo misteriosa, aun para el historietista.
EliminarEs necesario a veces romper las reglas.
ResponderEliminarMuchas veces respetar al otro es tan dificil jeje porque no la habrá tocado?
En ningun momento se afirma que no la tocó, ni que fue tocado por ella. Lo que estaba prohibido era acariciar a contrapelo, después de todo es una mujer felina, y tratar de ver que oculta su máscara. Nada más.
Eliminar¡Ojo Demiurgo! Cuando una mujer dice ¡Basta! pueden volar por el aire muchas cosas...
ResponderEliminarMe gustó esta gata traviesa, tenés en ella personaje para continuar.
mariarosa
Lo voy a tener en cuenta. La idea es que haya más relatos con este personaje.
EliminarMe ha gustado ese respeto que demuestra un verdadero interés.
ResponderEliminarBesos
Es un buen planteo. No podía arriesgarse a perderla.
EliminarLuchó por convertirse en un historietista, y ahí estaba la gata para inspirarle.
ResponderEliminarUn abrazo
Es un buen resumen. Gracias por el comentario.
Eliminarel misterio lo termino favoreciendo.
ResponderEliminarY de que manera. Gracias por el comentario.
EliminarMe quedo reflexionando sobre esos principios que son capaces de quebrar algunas leyes...esta mujer felina parece merecer su nombre!
ResponderEliminar=)
Curiosamente, no sabemos su nombre, si usa un nombre clave.
EliminarTampoco como clasificarla. Podría tratarse de una villana con principios, en el comics hay villanos con principios.
Me sorprende haber hecho pensar a una lectora tan lúcida. Para que esta historia es mejor de lo que pensaba.
jeje..."harto" significa exactamente eso en boca de un hombre. Pero "harta" abarca a toda la Real Academia si lo dice una dama, incluso si es de cómic, jajajaja...
ResponderEliminarQue interesante planteo.
EliminarSer demasiado prudente puede hacer que pierdas una gran oportunidad, a veces para ganar hay que arriesgar. Es muy triste al pasar el tiempo arrepentirse de no intentar lograr tu meta.
ResponderEliminarBesote
Me parece que este no es el caso. El historietista tal vez se haya arriesgado a recibir a una desconocida de la que no conoce su verdadero nombre, ni su rostro, tampoco el color de pelo. La mujer felina se arriesgó a quedarse dormir, abrazada al historietista, confiando en que respetara su misterio.
EliminarNi las gatas ni las tigresas suelen atender cuando se les dice !Basta!.
ResponderEliminarSaludos.
El historietista está muy lejos de decirle basta. Se supone que son muy tímidos. Este podría ser una excepción.
EliminarMe pregunto qué habría detrás de la máscara. Seguro que aquella mujer inspiró muchas historias al historietista. Un beso.
ResponderEliminarEl tema de las identidades podría tener su lado complicado, ella podría sentirse más identificada con la máscara que con su rostro, que probablemente sea de una mujer atractiva. Sin la peluca, se vería que es morocha o de pelo castaño.
EliminarTal vez respete el misterio, porque le da intensidad a esa relación tan especial, inspiradora de historias.
Un beso.
basta, basta y basta...esto lo podría decir él...él podría acariciar a contrapelo...¿por qué no? sería una forma de rabieta, pero hecha realidad...
ResponderEliminarmedio beso.
Es que se trata de una mujer felina. No quiere arriesgarse a perder a una inspiradora, que además se convirtió en su amante, novia, o algo por el estilo.
EliminarHay ¡Basta! y ¡Basta! que son saludables. Se queman etapas y empiezan otras. Cuando se sale favorecido y la creatividad toma vuelo propio, hay que sentirse dichosos.
ResponderEliminar(seguro que también ensayó otro tipo de caricias, para un historietista eso no ha de ser difícil, y más con semejante musa en frente!)
Besos!
Gaby*
Sí, es cierto, es bueno para empezar etapas nuevas. También es cierto que hay sentirse mejor en esas circunstancias.
EliminarY seguramente el historietista ensayo otro tipos de caricias, con semejante musa en frente. Tenés razón.
Hummm, debería pedirle a ella permiso y mirar bajo la máscara; si ya hay confianza suficiente como para quedarse con el, digo yo, que tambien la habrá para que se miren "cara a cara" :)
ResponderEliminarBss.
Bien planteado, podría a llegar a pasar en el futuro.
EliminarMenudo carácter, bien llamada por tanto mujer felina.
ResponderEliminarAbrazos.
Sí, tiene su carácter, también es capaz de deslumbrarse por alguien como el dibujante y guionista, tomando la iniciativa de quedarse. Algo que no habría sucedido de depender de la iniciativa del historietista. Que no quiere correr el riesgo de despertar ese caracter.
Eliminardigamos que de esta historia pueden surgir muchas otras, vaya me ha gustado
ResponderEliminarPuede ser que surjan más. Gracias.
EliminarAquí estoy, siguiendo las huellas de esta mujer felina!
ResponderEliminarSon huellas interesantes de seguir. Están los relatos anteriores, puse los links correspondientes. Es una forma de seguir sus huellas.
EliminarYo tambien quedo expectante, ante esta historia que me parece muy especial y singular. ¿continuará? o el ¿basta ya es definitivo?
ResponderEliminarSaludos cordialaes.
Habrá más historias en la medida que la inspiración me lo permita.
EliminarEl basta fue la motivación de los dos personajes, no un cierre.
Gracias por el interes en esta historia.
Saludos.
Generas un misterio, con la máscara y ese basta que deja ganas de más.
ResponderEliminarUn beso.
Gracias por el interes. Probablemente haya más.
EliminarUn beso.
Recuerdo tu mujer felina... yo también quiero más, me gusta la historia y quiero saber más del historietista.
ResponderEliminarBesos demi!!
Gracias por el interes en esta serie historia, que empezó por casualidad o por una misteriosa inspiración. Habrá, si la inspiración o casualidad continúa.
EliminarBesos.
A veces, un ¡basta! a tiempo, puede constituir una victoria y ser el principio de un cambio.
ResponderEliminarUn abrazo.
Totalmente de acuerdo.
EliminarYo no me quejaría, es todo muy sutil, misterioso y atractivo.
ResponderEliminarY tratándose de una dama sólo con una máscara y la melena rubia... que sea lo que el destino quiera.
Abrazos
No hay motivos de queja, creo que el misterio le da cierto atractivo. Los deseos del historietista se cumplieron, probablemente se repita.
EliminarMe quedo con: quebrantar algunas reglas por los principios que enarbolamos.
ResponderEliminary el respeto al secreto y la intimidad aun, cuando el otro ni se entere.
El relato, tiene que ver con el tema, claro que sí.
un abrazo
Gracias por confirmarme que el relato está relacionado con el tema. Y me pareció importante destacar el respeto al secreto que ella prefiere mantener en secreto, aun para alguien por el cual siente atracción.
EliminarGracias por el comentario,
La mujer felisa sabe de sobra imponer su basta, pero es que descubrir que se esconde bajo la máscara, invita a seguir...
ResponderEliminarUn abrazo.
Está bien lo de mujer felisa (felis=felino). Cabe preguntarse si el historietista no prefiere el misterio. Gracias por tu interes, probablemente haya más historias.
EliminarUn abrazo.
Esa mujer fue su inspiración quién le sacó de la monótana vida bajo los demás. Un beso
ResponderEliminarEs lo insinuaba en las historias anteriores, confirmarlo me ayudó a tratar el tema propuesto. Y además es el tema de la inspiración que suelo mencionar.
EliminarGracias.
No corresponde espiar detrás de la máscara de mujeres felinas recostadas al lado de uno.
ResponderEliminarHasta a veces es irrelevante hacerlo.
Abrazo
Tal vez haya planteado una metafora sin proponermelo.
EliminarEstá muy bien el planteo de que no corresponde y que además es irrelevante, sobre todo cuando está recostada tan próxima.
no está mal la consigna, a veces ajustarse es difícil...
ResponderEliminarte veo inactivo ja... mucho trabajo? salu2...
Gracias.
ResponderEliminarCasualmente estoy pensando en lo proximo.
Y algo de lo que decis es cierto.