“Resulta que esta semana se
cumplirá el aniversario de una vez en que resulté ganador del mayor premio en
un sorteo y se me ocurrió proponer este tema: EL PREMIO.
Ese será el tema de la
convocatoria, aunque para quien quiera rizar el rizo, propongo desarrollar una
idea que Chejov dejó apuntada y que nunca llegó a escribir.
“Un hombre, en Montecarlo, va al
casino, gana un millón, vuelve a casa, se suicida””.
Veré que puedo hacer.
La ceremonia
Fue una noticia rubia para Melisa, la rubia productora del programa. Quien le
contó la noticia a Paula Lowell, la astrónoma.
- ¿Van renovarnos el contrato?
- Ya lo hicieron.
Paula notó que el entusiasmo Melisa se había esfumado.
- ¿Cuál es el problema?
Silencio.
- ¿Es porque la ceremonia es aburrida?
- Muy aburrida. Lo suficiente para olvidarme, por una noche, del plan de
Anita, de ríos enamorados. Y de ese maldito barrio cerrado en que tenemos que
vivir.
- Entiendo- contesto Paula- Pero el círculo interno no ve Industria
Científica.
- Pero se reúnen para ver la transmisión de la ceremonia.
Paula notó tensa a la productora, pensando que su inquietud tenia
fundamento. El círculo interno había expulsado a Anita Zinc y aceptado a
alguien nefasto.
¿Te preocupa quedar expuesta ? Puedo ir en tu lugar.
- Estas más expuesta que yo.
- Estoy protegida por el rio. Aunque…ya no confiarían en mí. Y todavía podría ser necesaria para algún plan.
Pausa.
- Pero Anita puede ir. Ya la conocen.
En ese momento, la aludida se sumó a la reunión.
- Les aviso que Luz y Sol
no van a ir mas al barrio cerrado. Contrataron personal para la empresa de jardinería.
La astrónoma miró a la productora, quien asintió.
Llegó el día de los premios, llegó el momento de la categoría. La cámara enfoco
a Luz y Sol, que se veían hermosas, con sus vestidos elegantes, que las hacía
ver sugestivas.
Una pareja de actores anuncio que el programa ganador era… Industria Científica.
Hubo unas palabras que no despertaron repercusión. Llego el momento para Luz y
Sol.
El discurso conjunto de agradecimiento fue acompañado por algunos
aplausos.
Anita lo vio, apenas cubierta con una toalla, recibiendo un masaje de
Fito Cromo.
La pantalla el beso apasionado y cinematográfico
de Luz y Sol.
En algún lugar, frente a un televisor, alguien levantó su vaso para
brindar.
- Bien hecho, chicas.
La venganza de Anita Zinc